La profunda incidencia que tuvo en Latinoamérica y muy particularmente en el Ecuador la Revolución Proletaria
en Rusia de 1917; la crisis económica desatada en el país a raíz
de la caída del precio del cacao en el mercado internacional (principal
producto de exportación), la crisis del imperialismo yanqui que se agudizó e
incidió dramáticamente en la economía
nacional y obviamente la crítica pauperización de los trabajadores del campo y
la ciudad, estimularon la convocatoria a una huelga general en la ciudad de
Guayaquil que movilizó a más de treinta mil trabajadores explotados y que fue
cruentamente reprimida por miembros de la policía y ejército bajo el mando del
presidente José Luis Tamayo y el general
Enrique Barriga.
Las primeras víctimas fueron las obreras del Comité Femenino “Rosa Luxemburgo” que enarbolando rojas
banderas vanguardizaban la movilización. Posteriormente cientos de cuerpos
yacían masacrados en las calles de la ciudad y otros muchos fueron lanzados a
las aguas del río Guayas.
Es importante resaltar que no se dio una acción violenta
unidireccional por parte de las fuerzas represivas, sino que también hubieron
bajas en filas de la policía y el ejército represor, ya que los obreros se
hicieron de armas y combatieron dignamente en las calles arrancándoles
victorias al enemigo y desde luego, poniendo su cuota de sangre.
Tanto se ha dicho al respecto y sobre todo, mucho ha traficado el
revisionismo y oportunismo del Ecuador con la memoria histórica de los mártires
y combatientes del 15 de noviembre de 1922, sin embargo hoy los comunistas del Ecuador,
es decir los marxistas-leninistas-maoístas
recogemos esas rojas usanchas (banderas) y las levantamos como símbolos
ideológicos y propositivos que encarnan al proletariado y sus tareas por
destruir el viejo orden burgués-terrateniente en firme alianza con el
campesinado pobre y demás masas explotadas del país.
Escrito está en la historia de las luchas del proletariado
internacional la gesta del 15 de noviembre, refrendar esa voluntad de entrega y
potenciar su programa ajustado a los requerimientos
actuales que demandan los explotados del país y que se inscribe en la Revolución
Democrática de Nuevo Tipo (dirigida por el proletariado) también nos pone de
frente al formulamiento de un correcto programa de Nueva Democracia en el que
además de abordar y saturar las reivindicaciones democráticas que tienen los campesinos
pobres y explotados, la pequeña y mediano burguesía que tienen contradicciones
con grandes burgueses y el imperialismo,
es un imperativo fortalecer los espacios o alcances que demanda el proletariado
en el contexto de esta revolución y que genere las condiciones y el camino
necesario para propiciar su dictadura de clase en el socialismo.
No basta enunciar la revolución democrática bajo dirección
proletaria, es un imperativo que el proletariado conquiste reivindicaciones propias
de su clase, resuelva las contradicciones que tiene con la gran burguesía y se
fundamente de manera objetiva el rol que va mucho más allá de la conducción
ideológica plasmando su participación activa en el Nuevo Estado y la nueva
estructura económico-política de manera cierta y palmaria.
Esa es la tarea de los comunistas hoy, ubicar en el contexto
correcto el papel del proletariado en la revolución democrática y cómo este
proceso se supedita al requerimiento del proletariado internacional en el escenario
de las revoluciones que se ajustan a la
Revolución Proletaria Mundial.
El PCE-SR, reafirma sus principios subordinados íntimamente a la
ideología del proletariado, al cumplimiento de sus tareas, alianzas y
mecanismos que lo conduzcan a la implementación de su objetivo fundamental: la dictadura del proletariado.
Conmemorar hoy la gesta del 15 de noviembre es refrendar nuestro más
profundo compromiso de clase y que brega incansablemente por crear las
condiciones subjetivas para desatar la gran tormenta obrera campesina por
allanar el camino de la Revolución de Nueva Democracia como tránsito al
socialismo.
¡HONOR Y GLORIA A LA MEMORIA DEL PROLETARIADO
DEL 15 DE NOVIEMBRE DE 1922!
¡VIVA LA IDEOLOGÍA DEL PROLETARIADO Y SU
COMPROMISO CON LAS MASAS EXPLOTADAS DEL PAÍS Y EL MUNDO!
¡HONOR Y GLORIA A LAS MASAS EXPLOTADAS QUE
HAN PUESTO SU CUOTA DE SANGRE EN LA DESTRUCCIÓN DEL VIEJO PODER
BURGUÉS-TERRATENIENTE!
¡HONOR Y GLORIA AL PROLETARIADO Y MASAS
EXPLOTADAS QUE HAN PUESTO SU CUOTA DE SANGRE POR LA CONSTRUCCIÓN DEL NUEVO PODER!
¡VIVA LA REVOLUCIÓN DE NUEVA DEMOCRACIA,
UMBRAL DE LA DICTADURA DEL PROLETARIADO!
¡VIVA EL MARXISMO-LENINISMO-MAOÍSMO!
¡MUERTE AL IMPERIALISMO-MUERTE AL
REVISIONISMO!
PUEBLO DEL ECUADOR: ¡NO VOTAR!
¡PREPARAR LA GUERRA POPULAR!
A CONQUISTAR EL SOL ROJO DE LA LIBERACIÓN: EL
COMUNISMO
No hay comentarios:
Publicar un comentario